Un artefacto creado por el ser humano logró un hito inimaginable siglos atrás. La nave Cassini, lanzada en octubre de 1997 desde el cabo Cañaveral en el estado de Florida, logró pasar por el espacio reducido que hay entre el planeta Saturno y sus anillos, salió del mismo en óptimas condiciones y, en su última aventura, el denominado Gran Final, penetró en la atmósfera de Saturno con sus propulsores funcionando a pleno rendimiento y finalmente se desintegró a mediados de septiembre. La baja autonomía de la nave hubiera significado la pérdida y el descontrol de la misma y, según la NASA, su destrucción programada se efectuó con el fin de evitar una posible colisión con las dos lunas de Saturno, Encélado y Titán, ambas con posibilidades de vida microbiana. De esta forma se evitó una posible contaminación biológica o radiactiva por parte de Cassini. Ninguna otra nave ha estado tan cerca de Saturno. "El descubrimiento de mundos oceánicos por parte de Cassini en Titán y Encélado lo cambió todo, alterando nuestras ideas más profundas y mostrándonos lugares sorprendentes para buscar vida potencial más allá de la Tierra", expresó Thomas Zurbuchen, de la NASA. Esta es la última imagen tomada por las cámaras de formación de imágenes de Cassini, muestra el lugar por donde entraría, horas después, a la atmósfera del planeta. Aquí están las últimas imágenes de la misión Cassini.
Imagen: NASA / JPL-Caltech / Space Science Institute