Lugares con un carisma especial e identidad propia, las islas son entornos únicos para todas las especies que las habitan. Debido a su aislamiento durante el paso del tiempo, miles de especies que habitan las islas de nuestro planeta han desarrollado características y capacidades únicas, convirtiéndose en muchos casos en endemismos que no se encuentran en ninguna otra parte del planeta.
Un buen ejemplo de ello es Madagascar, con su interminable lista de fascinantes especies que sorprenden con sus colores, tamaños y formas. Sin embargo, además de las islas más famosas del planeta como pudiera ser el ya mencionado hogar de los lémures, existen otras islas mucho más remotas, inaccesibles y salvajes. En la mayoría de ellas, debido a su gran distancia hasta la civilización, ni siquiera ha llegado a establecerse el hombre.
Estos rincones del planeta son algunos de los grandes anhelos de exploradores, naturalistas y fotógrafos a lo largo de la historia por una simple razón: su inaccesibilidad las hace únicas.