Los gibones de Hainan -Nomascus hainanus- son una especie de primates catarrinos sin cola que habitan exclusivamente en China, en los bosques de la isla que les da su nombre. Dentro de su hábitat, estos primates se desplazan por las alturas de un árbol a otro. Se trata una especie clasificada en peligro crítico de extinción por la Unión Internacional de la Naturaleza -IUCN, que es altamente dependiente de su ecosistema, en el cual, los huecos en el dosel del bosque, ya sean naturales o artificiales, pueden restringir las poblaciones a un área específica, limitar espacialmente su búsqueda de alimento, aumentar las posibilidades de ser depredados y mermar sus oportunidades de reproducción, todo lo cual contribuye en última instancia a acelerar su completa desaparición.
No obstante ahora, el que hoy en día es el primate más amenazado del mundo ha sido observado por primera vez cruzando puentes de cuerda artificial construidos para conectar grandes brechas en el dosel de su hábitat forestal, un hallazgo que sugiere que dichos puentes de cuerda artificial podrían ayudar con los esfuerzos de conservación que se están llevando a cabo para salvaguardar las poblaciones de la especie.
Bosco Pui Lok Chan del centro de conservación y educación Kandoorie Farm & Botanic Garden y sus colegas llevan desde el año 2015 estudiando a estos primates. Para llevar a cabo su experimento, cuyas conclusiones se publican esta semana en la revista Scientific Reports bajo el título First use of artifcial canopy bridge by the world’s most critically endangered primate the Hainan gibbon Nomascus hainanus, construyeron un puente artificial en el dosel del bosque para que los gibones de Hainan pudieran salvar una distancia entre dos áreas de hábitat separadas por un barranco de 15 metros de ancho formado por un deslizamiento de tierra natural. De este modo ataron cuerdas de escalada a árboles resistentes con la ayuda de escaladores de árboles profesionales e instalaron varias cámaras con sensores de movimiento para monitorear el uso que la vida silvestre hacía de ellos.
Foto: Kadoorie Farm and Botanic Garden
Así, los gibones de Hainan fueron fotografiados por primera vez cruzando el puente de cuerda 176 días después del realizar el montaje. Durante un período de estudio de 470 días, se tomaron 208 fotografías y 53 videos de gibones usando las instalaciones que el equipo de Chan había proporcionado. Las imágenes, algunas de las cuales los científicos nos han proporcionado, capturaron a los gibones realizando movimientos de escalada a lo largo de las cuerdas demostrando la utilidad de las mismas como conectores del hábitat de los primates que le pueden ofrecer nuevas probabilidades de supervivencia a la especie.
El estudio destaca el uso y el valor de los puentes de cuerda para conectar brechas en las copas de los bosques. "Y aunque la restauración del bosque natural debería ser una intervención de conservación prioritaria, los puentes de dosel artificial pueden ser soluciones útiles a corto plazo para estos primates" concluyen los autores.
Foto: Kadoorie Farm and Botanic Garden