Un estruendo creciente y una actividad sísmica in crescendo alertaron en septiembre a las autoridades indonesias sobre la inminente erupción del majestuoso monte Agung, situado en el este de la isla de Bali y con una altitud de 3.000 metros sobre el nivel del mar. El pasado martes, el volcán Agung experimentó una pequeña erupción freática (expulsión de vapores y rocas pulverizadas, sin presencia de magma), cuya nube volcánica superó los 3.800 metros de altura. A continuación ocurrieron dos erupciones magmáticas en la misma semana: el sábado y el domingo.
La columna de cenizas ha alcanzado los 9.144 metros de altura
Las autoridades indonesias se han visto obligadas a cerrar el aeropuerto internacional de Denpasar, la capital de Bali, y miles de viajeros permanecen atrapados en la isla. Todos los vuelos han sido cancelados y, por otro lado, se ha ordenado la evacuación de hasta 100.000 residentes ante el riesgo de que se produzca una erupción volcánica masiva. La columna de cenizas ha alcanzado este lunes los 9.144 metros de altura, según informa el Servicio Meteorológico de Australia. Entre febrero de 1963 y enero de 1964 ocurrió la última erupción en el monte Agung, la más grande y devastadora que ha experimentado Indonesia en el siglo XX, superando el millar de muertos.