Una nueva especie de avispa, desconocida para la ciencia, ha sido descubierta en la zona de transición extraordinariamente diversa que hay entre la cordillera de los Andes y la selva tropical de las tierras bajas de la Amazonia, en la parte occidental de esta región. "El aguijón de la nueva avispa parasitoide, llamada Clistopyga crassicaudata, no sólo es largo sino también muy ancho en comparación con el tamaño de la especie. Hace tiempo que estudio las avispas parasitoides tropicales, pero nunca había visto algo así. El aguijón parece un arma feroz", explica Ilari E. Sääksjärvi, de la Universidad de Turku en Finlandia y coautor del estudio de la nueva especie, publicado en Zootaxa. El insecto usa su aguijón tanto para la puesta de huevos como para inyectar veneno.

La nueva especie parasitoide pertenece al género inusual Clistopyga, especializado en depositar sus huevos en las arañas o en los sacos de huevos de las arañas: la avispa busca aquellas arañas que viven en nidos y las paraliza con una rápida inyección de veneno; la avispa hembra deposita entonces sus huevos en la araña y, tras la eclosión, la larva se alimenta de la araña paralizada e incluso de los posibles huevos de la araña o crías.
"No sabemos con seguridad qué araña prefiere esta especie de avispa. Hace un par de años describí los elaborados y fascinantes hábitos de la avispa parasitoide Clistopyga junto con Niclas Fritzén, un doctorando de la Unidad de Biodiversidad de la Universidad de Turku. El insecto que estudiábamos entonces podía usar su aguijón como una compleja aguja para el fieltro, cerrando cómodamente la telaraña y atrapando a la araña en su interior. El gigantesco aguijón de la especie actual probablemente sea también una herramienta sofisticada, pero de momento sólo podemos adivinar su propósito", concluye Sääksjärvi.