Recientemente saltó la noticia en los medios británicos de que Fairbourne, un pequeño pueblecito en la costa de Gales, sería el primer damnificado en el país por la previsible crecida del mar debida al calentamiento global. El gobierno ha decidido que no sale a cuenta el mantenimiento de las barreras de contención que protegen esta pequeña población de la subida del nivel del mar. En 2050 dejarán de funcionar y para entonces, sus cerca de mil habitantes actuales tendrán que haber abandonado su pueblo.
Este es solo un modesto ejemplo de la realidad a la que se enfrentan alrededor de 300 ciudades en todo del mundo, según las previsiones de la NASA, algunas de ellas con millones de habitantes y una historia única: desde la vibrante megalópolis de Tokio hasta islas de pocos miles de habitantes, pasando por lugares tan emblemáticos como Venecia, San Petersburgo o Nueva Orleans. Sus principales enemigos son el aumento del nivel del mar, la erosión y los fenómenos climatológicos extremos como huracanes e inundaciones. Estas son solo 6 de entre todas las que, cada una a su manera, buscan la manera de luchar contra su desaparición.