Londres es, sin duda, una de las ciudades más cambiantes de los últimos tiempos. Tras la reciente inauguración de The Shard, con 309 metros de altura y 95 pisos, se anunció el nuevo proyecto que cambiaría completamente el perfil de la ciudad: The Tulip. Su altura, su sorprendente diseño, su ubicación y su modernidad pretendían convertirlo en uno de los nuevos iconos de la City, el centro financiero londinense. Habría tenido más de 300 metros de altura, diversos miradores y se habría inaugurado en 2025. Sin embargo el ayuntamiento de Londres ha rechazado finalmente la propuesta. Desde el ayuntamiento inglés han alegado que el diseño de la torre es de "calidad insuficiente para una ubicación tan prominente" y han señalado que "daría lugar a un espacio público poco acogedor y mal diseñado a nivel de calle", pues, según las propias autoridades, el centro financiero ya cuenta con muchos rascacielos en un espacio limitado.