Diario Fotos Videos Vista aérea de la sierra de Amolar Estas montañas, las únicas de toda la región, están situada en la misma frontera de Brasil con Bolivia, al suroeste del Pantanal. Se trata de un entorno de gran belleza por sus montes cubiertos de selva, lagunas de aguas claras y playas de arena blanca. Lo llaman el Pantanal profundo. El Pantanal, una de las áreas húmedas más extensas del mundo Limita al oeste con Bolivia y ocupa los estados brasileños de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul. Cuando llegan las lluvias, el Pantanal se convierte en una gigantesca laguna de millones de kilómetro cuadrados, un territorio inmenso que alberga una gran biodiversidad. Navegando en lancha a la búsqueda de jaguares en el río Paraguay El río Paraguay es uno de los grandes ríos de América, por su caudal e importante biodiversidad. Nace en Brasil y es el principal contribuyente del río Paraná, tras atravesar Paraguay. Un jaguar descansa bajo los árboles de la selva El jaguar es el más grande de los felinos americanos. Los machos pueden superar los 150 kilos de peso y se les pueden encontrar desde México hasta el norte de Argentina. De hecho en toda América se calculan que viven entre 15.000 y 20.000 jaguares en libertad. Un jaguar al acecho de una posible presa en la orilla de un río del Pantanal Los jaguares están muy ligados a los ecosistemas acuáticos, donde suele cazar a sus presas para luego comérselas en tierra firme. Un jaguar (Panthera onca) atraviesa a nado un río a primera hora de la noche en busca de una presa en el Pantanal, Brasil Un jaguar se mueve sigilosamente por la noche en busca de presas Como todos los felinos, los jaguares están muy activos durante las horas nocturnas, cuando aprovechan para cazar. Su función de gran depredador es vital en los hábitats donde vive. Las manchas de los jaguares son claves para identificarlos Aunque en los lugares dónde viven los jaguares no se encuentran leopardos, para diferenciarlos de estos hay que fijarse en las manchas: la gran diferencia entre ambos felinos es que las manchas del jaguar en su interior tienen más manchas o puntos, y las de los leopardos están vacías. El jaguar está calificado en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como “especie casi amenazada”. De hecho la especie está en proceso de extinción en muchas zonas donde antes era un felino habitual. Un jaguar come un caimán junto a la orilla del río Estos ágiles felinos son especialistas en cazar caimanes. De hecho tienen una mordida tan excepcionalmente potente que son capaces de romper el cráneo de los cocodrilos. Un jaguar trepando a un árbol En general los felinos son buenos trepadores. Eso sí, de todos los grandes felinos, tan solo los leopardos y los jaguares utilizan los árboles habitualmente como atalaya desde la que avistar y dar caza a sus presas. Jaguar paseando por la selva del Pantanal, al sur de Brasil La destrucción de su hábitat, la superpoblación humana, el conflicto con el hombre por ataques al ganado, la caza furtiva y el comercio de pieles son las amenazas principales para esta fascinante especie de felino. Un jaguar descansa en su hábitat natural Los jaguares tienen una clara preferencia por los ríos, las lagunas, los humedales y los ambientes selváticos, aunque son capaces de vivir en otros tipos de ambientes, como zonas montañosas, bosques secos y hasta áreas semidesérticas. Jaguar en lo alto de un árbol Los jaguares muchas veces aprovechan su habilidad de caza para saltar desde las ramas o troncos de los árboles y atrapar a sus presas. En el caso del Pantanal, en muchas ocasiones, ese salto es directamente al agua del río. Jaguar paseando por la orilla de un río En el Pantanal (Brasil) es frecuente ver jaguares al borde del agua o incluso nadando. Sus sigilosos movimientos le permiten acechar presas como caimanes, capibaras o ciervos de los pantanos. Un caimán, conocido también como yacaré negro, flota sacando los ojos y pasa inadvertido Los caimanes son ahora comunes, pero hace unas décadas estuvieron en grave peligro. Hacia los años noventa se mataban a millares para la industria peletera y estuvieron a punto de desaparecer de muchas zonas del Pantanal y otras áreas de Brasil y Bolivia. Desparasitación in situ Un capibara (Hydrochoerus hydrochaeris) descansa en la playa mientras un tordo gigante (Molothrus oryzivorus) le quita lo parásitos de la piel. Los capibaras son comunes en el Pantanal y se trata de una de las presas habituales de los jaguares. Un mono capuchino de Azara (Sapajus cay) se alimenta de brotes verdes de una palmera en un bosque del Pantanal, Brasil Un caimán (yacaré negro) inmovil Cuando se mantiene inmovil y según el ángulo desde el que se mire este caimán parece un tronco oscuro. Este mimetismo tiene una doble función: evitar ser depredado y conseguir cazar presas para alimentarse. Un par de loras amazónicas o loro guaro (Amazona amazonica) bajo una lluvia torrencial en el sur del Pantanal, Brasil Un caimán o yacaré negro oculto entre la vegetación de la orilla de un río Los caimanes son presas habituales para los jaguares del Pantanal, Brasil. Una nutria come un pez que acaba de atrapar en el río Paraguay, al sur del Pantanal brasileño Estas enormes nutrias son unos de los grandes depredadores de los ríos sudamericanos. Las crías de pocas semanas tienen el tamaño de la nutria adulta europea, la nutria común. Los machos adultos pueden alcanzar, de la cabeza a la cola, los dos metros de longitud y pesar entre 40 y 50 kilos. Huella de jaguar en una playa de arena de un afluente del río Paraguay, a su paso por el Pantanal de Brasil El jaguar ha sido y es un animal emblemático para los pueblos de los territorios donde habita. Mayas y aztecas lo relacionaban con el poder, la fuerza y los dioses; para las tribus amazónicas está ligado al poder y la fuerza chamánicos.