Tener el privilegio de visitar una obra de Gaudí casi secreta y admirar uno de los proyectos que el empresario Eusebi Güell encargó al genial arquitecto y que, al ser un recinto privado, solo puede visitarse en contadas ocasiones es lo que vivió un grupo de suscriptores de National Geographic el pasado 25 de febrero en las Bodegas Güell, en el Garraf (Barcelona), guiados por los mejores expertos.
La obra desconocida de Gaudí
En 1874, el empresario catalán Eusebi Güell adquirió unos terrenos en el término del Garraf (Barcelona) donde se hallaba un torreón de tiempos de Alfonso XII, una antigua masía, viñedos y una cantera de piedra caliza.
NG
Años más tarde, en 1878, en la Exposición Universal del París, Güell conoce a un joven arquitecto que le deslumbra por su originalidad, Antoni Gaudí. A partir de entonces decide que será él quien diseñe todos sus proyectos, forjándose entre ambos una prolífica relación profesional y una sólida amistad que perdurará hasta el final de sus vidas.
NG
Son varios los encargos que el conde solicita al genial arquitecto, muchos de los cuales hoy forman parte del patrimonio cultural universal declarado por la UNESCO: la cripta de la Colonia Güell; el Palacio Güell; los pabellones Güell de Pedralbes, el Parque Güell…pero, el de las Bodegas Güell, construidas entre 1895 y 1901, es sin duda el gran desconocido.
NG
El recinto es un espacio privado que, de momento, no se encuentra abierto para visitas.
NG
El recorrido lo realizamos acompañados por tres expertos en la obra de Gaudí. Por una parte, Pere Jordi Figuerola y Manuel Medarde Sagrera, ambos miembros fundadores deThe Gaudí Research Institute (TGRI) y de la Cátedra Antoni Gaudí de la Universitat de Barcelona. Jordi Figuerola es además profesor y conservador emérito del arzobispado de Barcelona y Medarde es ingeniero, arqueólogo y conservador de la Cripta de la Colonia Güell. También nos acompañó en la ruta el arquitecto y gaudinólogo, José Manuel Almuzara.