Pego do Inferno, un edén a media hora de Huelva
Escondida en la parroquia del Santo Estêvão, a tan solo media hora de la frontera española, la cascada Pego do inferno es uno de los paisajes más impresionantes del sur de Portugal. Aunque se aleje de la imagen turística del Algarve, es una gran alternativa a las playas aglomeradas del verano.
Este salto de tres metros de altura es una de las cascadas principales del Río Asseca, el caudal que abastece la región de Tavira. Aunque podría parecer que su dimensión no es notable, sí que impresiona el color esmeralda de sus aguas, producido por el carbonato cálcico procedente de las rocas del entorno.
El Mirador do Pego, punto más alto de la cascada, ofrece la mejor vista de las piscinas de Pego do Inferno, cuyo nombre puede traducirse como 'Abismo del Infierno'. Según la leyenda portuguesa, este nombre proviene del fatal accidente de un carruaje que se despeñó por la cascada lleno de pasajeros. Al no encontrar ninguno de los cuerpos tras días de búsqueda e inmersiones, el acervo popular hizo sospechar que aquí se encontraba la puerta del infierno.