Pese a que vivimos en la era de la información y contamos con el mayor conocimiento médico de la historia, a día de hoy, las pseudoterapias siguen teniendo una amplia lista de seguidores. En muchos casos, son personas que están pasando por una situación emocional complicada o que están sufriendo a causa de una enfermedad, que tratan de encontrar una solución para sus dolencias en estas técnicas. En otros caso, son personas que basan su creencia en la mera experiencia personal. De cualquier modo, lo que está claro es que no existe ninguna base científica que respalde dichos tratamientos.

Por eso, en su Plan para la Protección de la Salud frente a las pseudoterapias, el Ministerio de Ciencia e Innovación las define las pseudoterapias de la siguiente manera: “Se considera pseudoterapia a la sustancia, producto, actividad o servicio con pretendida finalidad sanitaria que no tenga soporte en el conocimiento científico ni evidencia científica que avale su eficacia y su seguridad”.

El feng shui, el coaching transformacional, la gemoterapia, la orinoterapia y el tantra forman parte de la lista de 73 pseudoterapias.

Partiendo de esta definición, en 2019, el Ministerio de Sanidad y el Ministerio de Ciencia e Innovación publicaron una primera lista de 73 pseudoterapias confirmadas y otra de 66 técnicas y productos sin aval científico pendientes de revisión. Para elaborar esta lista, los ministerios valoraron 139 posibles pseudoterapias y comprobaron las publicaciones que se habían hecho de cada una entre 2012 y 2018 en PubMed, el sitio que recoge toda la producción científica.

Las técnicas sobre las que no se había publicado ningún estudio científico válido como, por ejemplo, el masaje en la energía de los chacras, el feng shui, el coaching transformacional, la gemoterapia, los cristales de cuarzo, la orinoterapia o el tantra, pasaron a formar parte de la primera lista de pseudoterapias confirmadas. Aquellas sobre las cuales sí había publicaciones, como las flores de Bach, la homeopatía, la arteterapia, la Gestalt o la acupuntura, se quedaron en la segunda lista, esperando un segundo análisis de aquellos estudios para contrastar la información.

Pseudoterapias peligrosas

La peligrosidad de las pseudoterapias recae en que, a diferencia de los fármacos regulados, estas no pasan todas las fases médicas y legales que los medicamentos deben superar antes de salir al mercado. Las pseudoterapias se comercializan sin contar con ensayos clínicos o una revisión sanitaria previa que confirme tanto su eficacia como su seguridad, por eso no solo pueden llegar a ser engañosas sino también perjudiciales y peligrosas para la salud.

En los últimos años, el Ministerio de Sanidad ha seguido investigando las pseudoterapias y ha publicado nueve informes desarrollados por la Red Española de Agencias de Tecnologías Sanitarias y Prestaciones del SNS (RedETS), en los que han analizado la eficacia y seguridad de la acupuntura, el Pilates, el yoga, la terapia floral, la reflexología, la musicoterapia, la terapia tumoral, la meditación y el masaje estructural profundo. Dichos informes y sus conclusiones se pueden consultar en la web #coNprueba habilitada por el Ministerio de Sanidad y el Ministerio de Ciencia e Innovación.

Así, los ministerios pretenden ofrecer información veraz y contrastada a la ciudadanía para prevenirles de tratamientos cuya eficacia curativa o terapéutica no ha sido aprobada científicamente.

Las 73 pseudoterapias

Análisis somatoemocional, análisis transaccional, ángeles de Atlantis, armónicos, arolo tifar, ataraxia, aura soma, biocibernética, breema, cirugía energética, coaching transformacional, constelaciones sistemáticas, cristales de cuarzo, cromopuntura, cuencos de cuarzo, cuencos tibetanos, diafreoterapia, diapasones, digitopuntura, esencias marinas, espinología, fascioterapia, feng shui, flores del alba, frutoterapia, gemoterapia, geobiología, geocromoterapia, geoterapia, grafoterapia, hidroterapia del colon, hipnosis ericksoniana, homeosynthesis, iridología, lama-fera, masaje babandi, masaje californiano, masaje en la energía de los chacras, masaje metamórfico, masaje tibetano, medicina antroposófica, medicina de los mapuches, medicina ortomolecular, metaloterapia, método de orientación corporal Kidoc, método Grinberg, numerología, oligoterapia, orinoterapia, oxigenación biocatalítica, piedras calientes, pirámide vastu, plasma marino, posturología, pranoterapia, psicohomeopatía, psychic healing, quinton, radioestesia, rebirthing, sincronización core, sofronización, sotai, tantra, técnica fosfénica, técnica metamórfica, técnica nimmo de masaje, terapia bioenergética, terapia biomagnética, terapia de renovación de memoria celular (cmrt), terapia floral de California, terapia floral orquídeas, terapia regresiva.

Las 66 posibles pseudoterapias pendientes de evaluar

Abrazoterapia, acupresión, acupuntura, aromaterapia, arteterapia, auriculoterapia, ayurveda, biodanza, caballoterapia o hipoterapia, Chi-Kung o Qi-Gong, constelaciones familiares, cromoterapia, crudivorismo, drenaje linfático manual, enfermería naturista, fitoterapia, Gestalt, hidroterapia, hipnosis natural, homeopatía, kinesiología, kundalini yoga, linfodrenaje, luminoterapia, macrobiótica, magnetoterapia, masaje ayurvédico, masaje estructural profundo, masaje tailandés, medicina naturista, medicina natural china, meditación, moxibustión, musicoterapia, naturoterapia, osteopatía, panchakarma, pilates, programación neurolingüística, psicoterapia integrativa, quiromasaje, quiropraxia, reflexología o reflexología podal o reflexoterapia, reiki, respiración consciente integrativa, risoterapia, sanación espiritual activa, seitai, shiatsu o shiatsu namikoshi, sonoterapia, tai chi, técnica Alexander, técnicas de liberación emocional, técnicas de relajación, terapia craneosacral, terapia de polaridad, terapia florar de bach, terapia floral de Bush, terapia herbal, terapia humoral, terapia nutricional, vacuoterapia, visualización, yoga de polaridad, yoga, zero balancing.