El análisis regional de 61 yacimientos arqueológicos identificados previamente por teledetección en los Llanos de Moxos, en Bolivia, acaba de arrojar nueva luz sobre la historia agrícola de los primeros habitantes de la Amazonia. El estudio, llevado a cabo por un equipo internacional e interdisciplinar de varias universidades, aparece publicado esta semana en la revista Nature bajo el título “Early Holocene crop cultivation and landscape modification in Amazonia”..

Del mismo se desprende que las técnicas de cultivo empleadas por los primeros humanos que llegaron a la zona, hace unos 10.000 años, transformó el paisaje mediante la creación de los famosos montículos que hoy en día se pueden observar en este inmenso humedal de la cuenca del río Amazonas. Según los autores del estudio, el cultivo de variedades de plantas como la calabaza o la mandioca provocó la formación de más de 4.700 islas de bosque en una zona que todavía a día de hoy se inunda entre los meses de diciembre y marzo, mientras que entre los meses de julio a octubre permanece extremadamente seca.
El cultivo de variedades de plantas como la calabaza o la mandioca provocó la formación de más de 4.700 islas de bosque
Estos montículos se mantienen por encima del nivel del agua durante la temporada de lluvias permitiendo que arraiguen y crezcan los árboles, lo que en su momento promovió la diversidad del paisaje. Esta diversidad dio pie al establecimiento de las primeras comunidades humanas que allí habitaron, quienes dieron forma a pequeña escala a la Amazonia unos 8.000 años antes de lo que se pensaba hasta el momento, confirmando, según la investigación, que se trata de unos de los principales centros de domesticación de plantas en el mundo.
Foto: Umberto Lombardo
"Arqueólogos, geógrafos y biólogos han defendido durante muchos años que el suroeste de la Amazonia fue un probable centro de domesticación temprana de las plantas, porque muchos cultivos importantes como la mandioca, la calabaza, los cacahuetes, algunas variedades de guindilla -chili- o la conocida como judía jackbean son genéticamente muy cercanas a plantas silvestres de la zona." explica Umberto Lombardo del Instituto de Geografía de la Universidad de Berna y uno de los autores del estudio. "Sin embargo, hasta este estudio reciente, los científicos no habían buscado ni excavado yacimientos arqueológicos antiguos en esta región que pudieran documentar la domesticación precolombina de estos cultivos de importancia global" añade.
Esto ha sido posible gracias al estudio de los fitolitos -células vegetales antes orgánicas y ahora mineralizadas- hallados en estos parches de bosques tropicales y pertenecientes a especies de mandioca, calabaza y maíz que datan de hace 10.350, 10.250 y 6.850 años respectivamente. Las plantas cultivadas en las islas de bosque fueron escogidas porque eran ricas en hidratos de carbono, fáciles de cocinar y probablemente proporcionaron una parte considerable de las calorías que consumían los primeros habitantes de la región, complementadas con pescado, un poco de carne y otros recursos obtenidos mediante recolección.
Foto: UPF
"Mediante una exhaustiva prospección arqueológica que incluyó excavaciones y tras analizar decenas de fechas de radiocarbono y muestras de fitolitos, hemos demostrado que los pueblos precolombinos se adaptaron a las sabanas inundadas estacionalmente del suroeste del Amazonia, y las modificaron, mediante la construcción de miles de montículos donde se asentaron y cultivaron, e incluso domesticaron, plantas desde el inicio del Holoceno" añade Javier Ruiz-Pérez, del Grupo de Investigación Culture and Socio-Ecological Dynamics -CaSEs- del Departamento de Humanidades de la UPF.

Por su parteJosé Iriarte arqueólogo y arqueobotánico de la Universidad de Exeter añade que "las pruebas genéticas y arqueológicas sugieren que había al menos cuatro áreas del mundo donde los humanos domesticaron plantas hace unos 11.000 años, dos en el Viejo Mundo y dos en el Nuevo Mundo. Esta investigación nos ayuda a demostrar que el suroeste de la Amazonia es probablemente la quinta. Las evidencias que hemos encontrado muestran que los primeros habitantes de la zona no eran sólo cazadores-recolectores tropicales, sino colonizadores que cultivaban plantas. Esto abre las puertas para sugerir que ya tenían una dieta mixta cuando llegaron a la región."