El oso panda actual (Ailuropoda melanoleuca), cuya población total es inferior a los 2.500 individuos, se separó genéticamente de sus parientes más cercanos, los otros osos, hace unos 20 millones de años. Unos investigadores chinos han conseguido secuenciar el genoma mitocondrial completo de un espécimen de panda gigante de unos 22.000 años de antigüedad, procedente de la cueva Cizhutuo, en la región autónoma de Guangxi, en el sur de China, donde actualmente no hay pandas gigantes en estado salvaje. El estudio, publicado ayer en Current Biology, demuestra que este antiguo panda se separó de los actuales pandas hace entre 144.000 y 227.000 años y sugiere que perteneció a un grupo distinto no existente hoy en día.

El genoma mitocondrial que ha sido secuenciado representa la evidencia de ADN más antigua de los pandas. "Usando una secuencia de genoma mitocondrial única y completa hemos descubierto un linaje mitocondrial diferente que sugiere que el panda de Cizhutuo, aunque genéticamente está más estrechamente relacionado con los pandas actuales que con otros osos, presenta una historia profunda y separada del antepasado común de los actuales pandas", dice Qiaomei Fu, de la Academia China de las Ciencias y coautor del estudio en una nota de prensa.
El análisis demuestra, por tanto, que hace unos 183.000 años se produjo la separación entre el panda de Cizhutuo y el antepasado de los pandas actuales. "Esto realmente subraya la necesidad de secuenciar más ADN de pandas antiguos para entender cómo cambió a través del tiempo su diversidad genética hasta su existencia actual en un hábitat mucho más restringido y fragmentado", añade.