La civilización maya fue una de las culturas mesoamericanas más importantes, extendiéndose por el sureste de México, Guatemala, parte de Honduras y El Salvador. Aunque existen registros que datan de alrededor del 2.000 a. C., las primeras ciudades mayas de cierta relevancia no se fundarían antes el 750 a.C. El esplendor alcanzado por Tikal o Palenque es visible a través de sus ruinas. Hacia el 950 d.C., el periodo clásico de los mayas comenzó a colapsar y sus principales asentamientos se abandonaron. Cuando llegaron los descubridores españoles, los mayas estaban presentes de forma dispersa, sobre todo, en la zona de Yucatán y Guatemala. Sin embargo, ofrecieron resistencia y se tardó 100 años en conquistar los últimos pueblos mayas. La cultura maya nos ha dejado construcciones mucho más complejas que las de los aztecas. En el campo de las matemáticas, realizaron cálculos avanzados y fueron de los primeros pueblos en usar el cero. Asimismo, la astronomía también formó parte del día a día de los mayas.