Los elefantes protegidos de Bengala Occidental, en la India, como éste del Santuario de Vida Salvaje de Mahananda, corren peligro. Desde 2004 han muerto 27, atropellados por los trenes que a lo largo de 160 kilómetros de vía atraviesan la zona protegida. Ahora los ecologistas y el Ministerio de Medio Ambiente instan al de Ferrocarriles a imponer límites de velocidad, reducir el tráfico nocturno (la mayoría de los accidentes ocurren de noche) y podar la vegetación para que los conductores tengan mejor visibilidad. –Catherine Zuckerman
Foto: Christophe Boisvieux / Gtres